Unos amigos se van a pasar el fin de semana a Venice Beach, y deciden preparar una broma. La noche anterior entierran un viejo cofre lleno de monedas (de chocolate) y al día siguiente fingen descubrir un tesoro enterrado en la playa.
Imagínate la que se lía cuando la gente se entera de que un tipo ha encontrado un tesoro enterrado en la playa… Una broma épica, genial.